Es una Samsung de 32 pulgadas con internete y todo. Disfruto como un enano viendo mis programas favoritos de Discovery Max, Energy y Xplora con la maxima calidad. El televisor es un regalo de mis queridos suegros, que a su vez consiguieron esta maravilla al cambiar la nomina de mi suegro por su pension, ya que se acaba de jubilar. Os puedo asegurar que esta valorado en bastantes cientos de euros.
Desde que lo tenemos, Esti y yo cerramos la puerta con dos vueltas a la llave, y no subimos las persianas, por si nos birlan el tesoro. Lo he configurado practicamente sin mirar las instrucciones, aunque lo del internet queda pendiente.
Me voy a pasar los proximos 10 dias solo en casa, porque mi diosa esta haciendo unos turnos extraordinarios, para pillar asi unos dias de vacaciones. Y ya tengo en mente unas sesiones de Harry el Sucio, grandes obras de Hitchcock, episidios a mansalva de IRT-Carreteras del Infierno, Top Gear, Embargos a lo bestia, y la lista de cosas que me molan ver televisivamente.
Lo bueno es el tamaño de la imagen , en relacion al televisor convencional que sustituye. Es algo asi como el doble de grande. Se ve mas nitido, y puedo verlo bien sin gafas.
En el futuro, podremos mirar los correos electronicos en el, jugar al Cityville a alta velocidad, y leer incluso el periodico, ya que la pantalla actua como una pantalla de ordenador gigante.
Para ser tan grande, es sorprendentemente ligero, sin llegar a pesar menos que la caja donde venia. Tenemos con el tdt integrado, unos 50 canales de tv, y unos 25 de radio de alta calidad. Encima gasta menos que una bombilla, con 39 vatios por hora. Son sorprendentemente economicos en lo relacionado con el consumo, cosa importante en estos tiempos de crisis.
Llevo una semana muy entretenido con esta maravilla.