27/7/10

SIERRA ELVIRA 2010

Ante todo, disculpas por andar mas perdido que la 12-13. Este año, las fiestas de Sierra Elvira se han corrido hasta practicamente finales de Julio, por eso de las fiestas que dependen de la fecha de Semana Santa.

Sabiendo que la cosa consistia en tres noches seguidas en fin de semana, pense en mejorar mi situacion durante las largas jornadas que se avecinaban con dos mejoras con respecto al año pasado.

La primera consistio en disponer de un USB conectado a internet, para estar entretenido, y la otra en ir en coche, en vez de moto, para echar una cabezadita cuando fuera posible o pertinente. En Sierra Elvira, me toca controlar una caseta ferial cuando no hay jaleo. En fin, que logre pillar un coche prestado, a traves de Manolo, porque el Clio en estos meses esta muy solicitado, y mas en fin de semana, que es cuando tocan las fiestas de este pueblo a escasos dos kilometros de Pinos Puente, cuna del imperio Romani Granadino.

Tras una conversacion con Pepe, la Sierra Elvira Experience quedo en solo dos dias, en vez de las tres de rigor, y sinceramente, eso me sento bien, ya que ando un poco flojo estos meses. La primera noche debia comenzar a eso de las 4 de la madrugada de un viernes a sabado, pero el dia anterior, Pepe me llamo a la sagrada hora de la siesta para ir pitando hacia alli, desde las Zubias, a unos 27km de distancia, para ordenar mesas y sillas, a las cinco de la tarde.

Es la peor hora del dia, con temperaturas a la sombra de 40 grados, y pocos sitios para estar resguardado del solano sin merced que abrasa la tierra como una patata cocida. Como la Kawa sigue y seguira temporalmente fuera de combate, y el coche no lo podia coger hasta la noche, me toco ir en Bestia Imperial ahi.

Tampoco es que sea un trayecto muy largo incluso en Vespa, pero no me molaba la idea, `pero era la unica posiblidad que tenia para desplazarme en ese momento. Llegue, exactamente una hora despues de hablar con Pepe, tal como le dije, y me encontre con Mini Pepe, que es su hijo adolescente asandose de calor y armado de un spray mata bichos, debajo de la macro carpa ferial.

Con unas tres horas por delante, monte las 35 mesas tal como lo recordaba del año anterior, descansando de vez en cuando para pegar un buen trago de agua helada. Una vez terminado, le pegue un manguerazo a la Vespa, y espere a Pepe junto a su hijo, mientras el calor aminoraba levemente por la tarde.

Para situarnos, la plaza del pueblo linda con la carretera nacional que va a Cordoba, y este a su vez corre paralelamente a la via de ferrocarril, con una separacion de unos 100 metros entre ambos.

Cada vez que veia o oia un tren, desviaba la mirada para ver un tren en movimiento, lo cual es normal, ya que siempre me han llamado la atencion, aunque lo de viajar en tren no me guste tanto, tras pasar 12 horas en un puto talgo para hacer los 420 km que separan Granada de Madrid, en los tiempos de las locomotoras de carbon y vapor.

Este año, sobre el escenario teniamos a la orquesta Velada de Malaga, y el trio este con el que Manolo hizo bis en La Rabita, pero el que esta pegado a Alcala la Real, practicamente en la provincia de Jaen.

Mientras fregaba mesas, se me acerco Quico, de los Velada, para preguntarme si yo era el que habia estado el año pasado controlando los temas de antiterrorismo, y le conteste que si, que yo repetia. Y entonces me dijo que habia leido este blog, y que le habia gustado. Pues bien, entre el calor, y la sorpresa de encontrarse gente que lee el blog sobre quienes he escrito, me quede un poco flipado, pero encantado de mantener entretenido a gente tan maja.

Tambien me encontere con Blas, que por lo visto ha desechado el gimnasio, aunque sigue en forma, tal como describi el año pasado. La verdad es que entre todos los que trabajamos en este evento, o colaboramos, como es mi caso, hay muy buen rollo, y el sitio es realmente tranquilo, y eso que estamos a poca distancia de una zona muy conflictiva.

Cuando aparecio Pepe, sali cagando leches a por el Buga, que era un Polo del 90, pero el GT de 80 caballitos, y con aire condicionado. Sobre las 4 de la madrugada, llegue otra vez a Sierra Elvira, y tras un ratillo de cachondeo, me quede solo en medio de la oscuridad de la noche con mi portatil, esta vez conectado a Internete. Como estaba desvelado, y con un Jet Lag del carajo, me pase un monton de horas, hasta el amanecer, investigando temas de micologia profunda, y escribiendo los dos posts anteriores.

Al amanecer, intente echar un sueñecito en el Polo, pero los operarios de limpieza a eso de las 07.30 me impidieron echar unos ronquidos, asi que volvi a las teclas, para ponerme al dia de lo que pasa en el mundo.

Aparte de la carretera, el sitio es muy tranquilo, y hasta el mediodia, el sol no aprieta demasiado en la plaza. Al rato aparecio Emilio, que es un lugareño, que le gusta sentarse un rato en plaza cada mañana. Me pidio prestado una silla, y yo segui divagando acercana idea que esta cuajando en mi cerebro, ya en unos meses estare bien de fondos para montar algo propio y sin socios.

Basicamente, estoy pensando en volver a la agricultura, con una pequeña explotacion, siempre y cuando consiga el sitio adecuado por el precio adecuado. Quiero meterme en un barco donde mande yo, y no tenga que tener broncas ciclicas y diarias con nadie. Ademas, la agricultura ecologica esta en alza, y me mola la idea de hacer algo que de un producto de primera necesidad, ya que luego se puede colocar con relativa facilidad.

En fin, volviendo a Sierra Elvira, mi madre, la noche anterior, me preparo una botella de litro y medio de cafe negro, con azucar, que para el medio dia iba ya por la mitad. Pero asi evite escaparme al bar a por mi chute matutino, aunque le podia haber dicho a Emilio que me echase un vistazo a todo en los cinco minutos que tardo en ir y volver, mientras veo todo desde la puerta del bar, en lo alto del pueblo.

El enfermo de los chupinazos, un Pamplonico frustrado que se hace pasar por Andaluz, y que todos los años suelta cohetes durante la mañana en el pueblo, de forma aleatoria, decidio evitar mi parte del pueblo, y con alevosia y mala idea, solto los petardos desde una explanada fuera de mi campo de control.

El año pasado le monte una bronca por mantener a los Velada despiertos, y tambien, porque en el fondo, me molestaba bastante a mi tambien. Pues bien, he conseguido que este año el tio suelte los cohetes desde un sitio alejado de la plaza, aunque sigue dando por saco. De hecho, ni le vi llegar, ni le vi irse en su coche.

Y mientras tanto , el calor se hacia mas y mas intenso. Es un calor torrido, que te seca en minutos y segundos si te refrescas. Este año llevo los calores bastante mal, pero es lo que toca por vivir en un sitio con unos extremos de temperatura tan grandes en invierno y en verano.

Mientras tanto, Pepe me llamaba cada dos horas o asi para preguntarme como estaba la plaza, recordandome un poco a mi padre, que me llama asi todos los dias, para ver si he vendido un anuncio de Publizito. En fin, finalmente Pepe me pregunto si me gustaba el pollo asado, para encargar uno para mi, para la comida.

Y a las tres de la tarde, aparecio con un pollo asado, con patatas, pan y alioli, que me jale en un plis plas, y eso que no tenia ni tenedor ni cuchillos...

Pero el pollo asado se vengo de mi, en la retorcida forma de un diarreazo de troñio y muy señor mio, y casi fulminante. No me gusta para nada utilizar cuartos de baño ajenos, pero los retortijones muy pudieron, asi como la situacion de calma en la plaza, asi que me fui el WC de las escuelas, de donde yo tenia la llave, y se utiliza de camerino en fiestas.

Fue bajarme los leotardos, y soltar tras kilos y medio de pollo mediodigerido y licuado por el porton trasero. Senti un enorme alivio, y tras gastar un rollo y medio de papel, y algo de jabon lagarto para limpiarme los zuños, sali aliviado a la plaza, para seguir con mis labores especiales.

No volvi a tener necesidad de ir al WC, lo cual estuvo bien, teniendo en cuenta a como me senti cuando note los primeros estrujones estomacales.
La tarde fue tranquila, y monte las mesas y las sillas tranquilamente, alternando ratillos en el coche con los pies en alto. Pero no conseguia dormir aunque fuera unos minutos, y eso me intranquilizaba.

A las 20hrs en punto pude irme, porque aparecio Antonio, el camarero. Fui pitando a hacer una pequeña compra para mi madre, y ya en casa, tras una buena ducha, intente dormir un rato, hasta las 23 hrs. Habia quedado con Manolo a las 00hrs, para ayudarle a desmontar un bolo en Plaza del Camplillo, en Granada, para posteriormente repatriar a su primo Javier hasta Casanueva, que es donde guardan la autocaravana, y Manolo lo comparte con Javier, que lo habia traido a Granada (la autocaravana).

Una vez en Casanueva, a eso de las dos de la mañana, la idea era echar otra microsiesta, para volver a Sierra Elvira sobre las 4. Vi documentales durante gran parte de las dos horas que estuve en casa de Javier, y logre dormir unos minutos, saliendo sobre las 4. Pare por el camino para echar un pis, y cuando llegue, tras escasos 10 minutos de trayecto, porque Casanueva esta al lado de Pinos, habia ambientillo en la plaza, y estaban tocando los Velada.

No les habia visto el año pasado tocar, y tras aparcar el coche en la parte alta del pueblo, con una panoramica de la plaza delante de mi, me coloque en el asiento del copiloto, y vi el ultimo bis de su actuacion. Sinceramente me gusto muchas de sus versiones, y son unos profesionales como la copa de un pino. Sobre las 5 la cosa fue menguando, y hasta las 6, Pepe y familia estuvieron cerrando la caseta.

Ya solo, intente descansar, logrando dormir unos minutos, mientras los Velada desmontaban, para dejar libre el escenario al trio Aires Nuevos. Desmontaron hasta el alba, dejando su camion cargado, y posteriormente los tres integrantes del camion, capitaneados por Blas, echaron una siestorra en las literas del camion con un aire acondicionado portatil para estar mas fresquitos. Senti sana envidia, pero hasta medio dia, insisto, la plaza es bastante agradable.

El domingo tocaba fiesta de la espuma, y degustacion de jamon, como el año pasado. Y sobre las once o asi, la plaza se lleno de niños y mayores, buscando divertirse entre la espuma. El tio que trae la maquina estuvo apenas una hora, pero fue suficiente para que todos se lo pasasen pipa.

Y sobre las 13hrs, hora arriba o abajo, los Velada se despertaron, y volvieron a Malaga. Es curioso, pero entre el año pasado y este, es como si no hubiera un año por medio. Vamos, que me parece hasta habitual ver como sale de la plaza su camion. Es lo que te pasa cuando trabajas puntualmente con gente durante el año, y me pasa lo mismo con el tio de el Buñuelo, en Lanjaron. Manolo y yo llegamos, nos ponemos a hablar, y vamos a Sorvilan o el pueblo que sea de esa parte de la Alpujarra, como si fuera algo cotidiano, y no como algo que tiene 365 dias entre viñeta y viñeta.

Me recuerda un poco a la pelicula de Bill Murray 'Groundhog day', cuya traducion literal en castellano seria 'el dia de la marmota'. No se como se llamo esa pelicula en España, pero Murray lo protagonizaba con una Andie Macdowell todavia tierna y sabrosa, hace casi 20 años. Basicamente, el tio revivia una y otra vez el mismo dia, dia tras dia. Lo mio tienes matices andaluces, y con un hueco de muchos meses entre dia revivido, pero esencialmente, la sensacion es parecida.

Acto seguido, aparecio Pepe con una caja de jamon cortado en lonchas, y empezamos a repartir jamon entre los asistentes, y cerveza tambien. El grifo de la birra no tardo en quedarse bloqueado, pero se pudo solventar la cosa con un poco de paciencia, ya que es un grifo con una serpentina pequeña, con poca capacidad para soltar muchos litros de golpe.

Hubo algo de friccion entre los asistentes por el jamon, pero este año la cosa no llego tan lejos como el año pasado, y pudimos repartir todo equitativamente.

Y tras el jamon, Pepe y familia se fueron, y yo me quede con un par de grupos de gente joven en la plaza, que me dieron la lata para venderles alcohol. Finalemente, con un chaval algo pesado, logre hacerle entrar en razon, y le mande al Mercadona de Pinos, aunque era domingo..

Mientras, recogi las mesas, menos las de una parte, porque habia un grupo de chavales jugando con la manguera. El mas imbecil de todos decidio regarme, y senti ganas de retorcerle el pescuezo con un pollo pre-asado, pero mi firme y controlado genio irlandes me pudo, y me meti en el coche, mientras el grupo entero disfrutaba dandome por saco. No les hice ni puto caso, y al final se fueron, dejando sus mesas hechas un estercolero.

Es lamentable la falta de respeto que tienen algunas generaciones, y mas de uno precisa de una buena yoya para enderezarse. Cuando la mili era obligatorio, los mamoncillos pubiscentes no tenian patente de corso para dar por saco. En fin, que entre eso, o una furgoneta lleno de PinosPuentecinos de tez oscura, prefiero un grupo de adolescentes malcriados.

El resto de la tarde transcurrio apaciblemente, y tuve que esperar a Pepe, que aparecio a eso de las nueve de la tarde. Supuestamente me tocaba terminar a esa hora, pero Pepe estaba malo otra vez, y me propuso pasar otra noche mas, esta vez hasta las 10 de la mañana como mucho, empezando a las 4 de la madrugada del domingo al lunes.

Acepte, porque para una vez que hago algo, no es plan quitarse de enmedio, y porque me suponia mas dinero. Ya llevaba mas de 36 horas sin pegar ojo, pero estaba en un especie de trance, y sabia que podia aguantar unas horas mas. El plan era cargar los bartulos a las 7 de la mañana en la furgoneta de un transportista, y yo me quedaria para esperar a la gente de las bebidas y el hielo.

Cuando llegue a las 4, la caseta estaba medio desmontado. Y cuando se fueron, intente navegar un rato, pero era imposible, Pero tampoco lograba dormir en el coche, asi que cuando llego el transportista, yo tenia los ojos como brotolas.

Le ayude a cargar las mesas y sillas, y entonces aparecio Pepe otra vez, para guiar el tio hasta Lachar. No entiendo porque no lo cito en Lachar directamente, con la furgoneta cargada, pero quizas eso explica porque Pepe hace kilometrajes espectaculares al final del año.

Sobre las 9 aparecio el camion de las bebidas, y la cosa pintaba bien para poder salir de ahi a la hora prevista, pero faltaba que viniera el tio del hielo, que era de Loja (a unos 60 km de distancia), a recoger dos arcones frigorificos. Tras varias conversaciones telefonicas, a las 10 de la mañana dijo que tardaria entre una hora y hora y media en llegar, con lo cual, yo no podia irme hasta que apareciese. Manolo, mientras, estaba desesperado en que yo volviese, para acercarle a un taller de electronica para que le arreglasen una etapa de potencia, pero con varias llamadas telefonicas, pudimos negociar la cosa.

Mientras, Pepe volvio de Lachar, y me relevo, mientras me fui a desayunar a Pinos.

Al volver, me pago, muy correctamente como siempre, y ya nos despedimos hasta el siguiente embolao, que es un macroconcierto donde voy de tecnico con Manolo cerca de Guadix.

Mientras, conoci en persona la alcalde de Sierra Elvira, que se llama Paco, y ha vivido en Francia unos años. Tuvimos una agradable conversacion durante un buen rato, que hizo mas ameno la larga espera a que apareciese el capullo del hielo.

Entonces, una peste a pescado podrido empezo a corretear por la plaza como un niño pequeño con ganas de juerga, que resulto ser de la asociacion de ayuda a los marginados que hay en Sierra Elvira. Basicamente, habian tirado pescado a unos contenedores en la plaza, sin la bolsa pertinente, con lo cual los dos contenedores olian peor que un camion de pescado en medio del desierto, descubierto, y sin refrigeracion.

Y uno de los encargados de la escuela o asociacion, habilmente aparecio por ahi al rato, cuando les llego a ellos el tufillo, y cambio los dos molestos contenedores por dos contenedores del ayuntamiento, que estaban en la otra punta de la plaza, ante mi atonita mirada, y la del señor alcalde, que le recrimo por ello, recibiendo a cambio un seco 'es que estos contenedores de aqui son los nuestros...'

El caso es que hubo clientes de la caseta que se tuvieron que cambiar de sitio por la peste. En fin, que ese olor a putrefaccion era bestial, y no se me olvidara en la vida..

Finalmente, sobre las 12.30 del mediodia, aparecio el capullo del hielo, que hizo que mi estancia se alargara dos horas y pico largas en Sierra Elvira, cuando tenia que hacer otras cosas. Le ayude a meter los arcones, pero se me notaba el cabreo, y cuando me dijo que yo no tenia que firmar nada, sali cagando leches para recoger a Manolo, y llevar la etapa a arreglar.

Resumiendo, que la cosa ha sido tranquilita, y agradable, dentro de la pila de horas que me he tirado en la plaza.

PD. Gracias a los Velada por la bonificacion!!