Tras cuatro años sin montar en bici, he vuelto a coger mi Merida de 24 marchas. Era un deporte que me encantaba, y que echaba mucho de menos. Pero mi pasion por las Vespas me ha superado, y en un espacio de solo cuatro años, he engordado cerca de 25 kilos.
Tal aumento de peso se debe a mi definitivo adios al tabaco, hace dos años y diez meses, y muchos kilometros a lomos de la Bestia Imperial (Vespa px 150, cerca de 40.000 kmm en 4 años), y la Kawa Montesa (20.000 km en un año).
Mi Merida viene con ordenador de a bordo, y extras como un mini bombin y una bolsa para repuestos debajo del sillin.Este fin de semana pasado, he hecho 32 kilometros, que me han sentado genial. Mi idea es hacer un viaje diario a la oficina y vuelta todos los dias, con sesiones de 60-80 km los fines de semana por la Vega.
Voy a cambiar el piñon corto, para rodar mas rapido, y cambiare los gomaticos por unas casi lisas. Tambien tengo pendiente instalar un transportin para mi 'oficina movil', y un inmenso piton antimanguis cortesia de Spinola Motos, en el Zaidin.
En cuanto al GPS, he pensado en construirle una plataforma de cristal, para pegar directamente la ventosa al cristal, sobre el soporte del parabrisas. El GPS tiene una autonomia de unas dos horas, plenamente cargada.
Con ello pretendo tener mucha informacion para poder hacer mis buenos calculos de navegacion a bordo de 'La Merida',que es negra y plateada. Mi bici tiene un diseño sobrio, pero muy elegante. Lo compre a mi colega Antonio, de bicicletas BSM en la carretera de Las Gabias.
Tengo previsto perder unos 25 kilos antes de navidades, con el unico deporte con el que he disfrutado. Hasta hace 4 años, rozaba casi 1000 kilometros semanales a lomos de mis diferentes bicicletas, repartidas entre los casi 80 diarios llendo solo a trabajar, con mi BH ULTRA, y BANJULITA, una MTB con casi 50.000 km que ahora esta en 'La Cripta' cogiendo polvo antes de ser puesta en condiciones, para ser donada a un aldeaño del Senegal para moverse con soltura mientras cuida de sus cabritas.
Mi Massi me la robaron hace 6 años, y esa fue la bici mas cara que he tenido jamas, rozando los 1000 euros de valor final, con todo lo que le compre mientras le montaba el cuadro.
He comprado un Camelbak, tras ansiar tener uno durante muchos años. Es un deposito de agua que va en una mochilita. Llena le cabe aproximadamente un litro y medio de agua, que se mantiene fresquita gracias al principio de las bolsas de agua hechas con pellejos de cabra degollada en la Africa profunda.
Con mi viaje redondo semanal, empezare haciendo unos 120 km a la semana para empezar. Tengo previsto participar en la subida al Veleta, en el ultimo domingo de septiembre, segun mis calculos pertinentes. Mi idea es acabar la subida, en unas tres horas y media, de una pieza, aunque suba a paso de tortuga, y de los ultimos, cosa que dudo inmediatamente, ya que cuando me pongo,me pongo.....
No he podido participar nunca en esta subida, por temas laborales, o por simple desconocimiento de la fecha exacta de la celebracion de la subida. Son unos 27 km casi verticales, que MERIDA y yo subiremos de la mejor forma posible, sudando la gota gorda, y esperando encontrar a la Churri en la meta, para una sesion de Reflex por via intravenosa, y mimicos variados.
Cuando era mas joven, mi fama de mega ciclista inspiraba respeto, y quizas el regreso de Lance Armstrong me ha animado a volver a los pedales, aunque para mi, Indurain es mi ciclista favorito de todos los tiempos.
He seguido con interes la vuelta ciclista a España en el pasado, confieso que me lo paso mejor viendolo que viendo las monotonas carreras de Formula 1. En el pasado, he subido a todos los cerros que rodean Granada, y he bajado a Malaga varias veces.
Por muy poco, no pude clasificarme para participar en las carreras de Keirin en Japon, en mis tiempos, por escasos centimetros en la talla de mis nalgas. Ahi uno se clasifica en funcion de los centimetros de anchura de sus nalgas, y tras participar en carreras para principiantes. En mis tiempos participaba un holandes, y el deporte consiste en dar vueltas a un velodromo cubierto, en una bici de carreras, con una marcha fija, y sin frenos.
Las lesiones son bestiales, pero en Japon se mueve un paston con el Keirin. Supongo que por ahora me tengo que conformar con bajar mis 25 kilos cagando leches, y recuperando la forma previa antes de meterme de lleno en varios clubs moteros que me han dado grandes alegrias, y grandes disgustos.
Os ire contando como va mi regreso al Dr. Tomkat millasesual!!!!!
